domingo, 26 de junio de 2016

Digo macha



digo macha, digo bruta, hembra
tristeza
acto que permanece y satura
sin descanso al cuerpo

y haga lo que haga, gesta

desprende

inquietud  que está dentro 
 
y  no fue a plena,
ni cuando era más patas que cabeza
sin embargo,,, tanta vida!

No porque andar triste sea el  ideal  inherente
                                    que nos hace flacos
sino porque pone en valor
costo numérico de protos y hormos, 
sabiéndose  que  se es  luna a tierra
nueva,  sin posibilidad de freno
ni reposo latente
es
  sin  orden
  caos
que emerge

la tristeza hace entusiasmo

pero si el uño atraganta
cuando el hablar y el silencio resultan gemelos
            o dos caras de una otro/ un otra 
y hablan en diálogo

se traga
se hunde
y a fuerza de saliva,  corre 

poema, y corre de todos

porque sin trascender  su llegada
están
estamos
unidos en complejidad de brote
y somos

apariciones  en línea de tristeza
donde se dibuja,  la raíz del fragmento
con lápiz en punta,
engarzando lo que la Luna abona
 

Imperceptible,  creo
creamos entre lados de una política grotesca
dónde el Sol hace su Marte.
 

Quizá tenga arraigo lo macha
  en el silencio
desde el antes del antes
desde el ser  y escuchar
monótono y aturdida un tiempo
que trascurre  

tiempo fuera
del mí
  a los otros,, en la vida

y  este yo,  solo presente,
recorra
un espacio de habla notado  
que justifica  silencio

con trabazón de lengua
y  medias,
 que no vienen siquiera
a cuento

entonces siempre,  siempre y nunca
se habla de otra
  cosa,  Silvia, de cosas
menos tristes.
 

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